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Pepo Roestel: "A todo navegante le gusta compartir la actividad, estamos regalando una oportunidad a quien nos acompaña"

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Pepo Roestel, es el coordinador de la Escuela de Vela del Club Náutico Vilanova. Como muchos de los alumnos que pasan por nuestro club, se inició en el mundo de la náutica de muy joven en verano. Desde los seis años que no ha dejado de navegar. Por su carácter nunca entró en la competición, ha navegado siempre como ocio, eso si, profundizando el hedonismo que le genera el entorno marino.

"Cuando tienes 14 o 16 años, la vela es una salida más que excelente para dedicarte profesionalmente. En estas edades hay pocas posibilidades de encontrar trabajo y porque estás en un entorno privilegiado", confiesa Roestel. Le gustó tanto esta actividad que dejó sus estudios de ingeniería de telecomunicaciones para dedicarse plenamente como técnico de vela al Centro Municipal de Vela de Barcelona, ​​donde después fue el coordinador de la Escuela de Vela. En total estuvo dieciocho años en ese centro.

Para él la náutica representa aprender continuamente, un mundo que no tiene fin, "esto es altamente motivador. Sobre todo en estas rutinas confusas del día a día, que desilusionan muy a menudo. Ahora que se lleva mucho el 'mindfulness', la náutica te obliga a centrarte al 100% en el que estás haciendo, esto te enamora, dejas las rutinas en el suelo, tomas conciencia de que navegando luchas contra ti mismo, contra la naturaleza, pero a la vez aprovechando los elementos naturales para ir donde quieres. En el mar no hay dos días iguales", explica el coordinador de la Escuela de Vela.

Sin embargo, Pepo Roestel reconoce que a pesar de esta pasión "hay momentos que se necesita echar de menos el mar e ir a la montaña. Para saber que hay muchas más cosas que mi vida diaria. Convertir una pasión en tu trabajo requiere buscar ese equilibrio". A pesar de este último comentario, le gustaría disponer de su propio barco para disfrutarlo con su familia.

"La Escuela de Vela es la puerta de entrada al Club Náutico. Es la que crea afición, sigue formando a navegantes y permite seguir creciendo en este deporte", sentencia Roestel. La Escuela de Vela de nuestra entidad intenta popularizar la navegación a cualquier perfil de persona. Pero, por encima de todo, la navegación tiene una serie de valores integrados, sobre todo en los jóvenes en el ámbito educativo y para los mayores se trabaja la templanza. "Está demostrado empíricamente que un joven que se pueda sentir inseguro, en la vela ve que puede realizarla independientemente de sus aptitudes físicas. Esto da confianza. La vela es 100% adaptable a las intenciones de los participantes. Es muy singular de la vela que una persona no competitiva pueda llegar a ser profesional", explica el coordinador.

La Escuela de Vela del Club Náutico Vilanova desarrolla distintos programas de Vela Escolar. Uno de ellos es el Esport Blau, el equivalente a la semana blanca de las zonas de montaña. Pero también tiene firmados distintos acuerdos con centros educativos para que parte de la actividad física reglada y evaluada esté dedicada a la náutica. Aparte, hay muchos centros que puntualmente confían en el club para realizar actividades náuticas. Entre estas actividades y las propias de formativas del club, se calcula que 2.000 alumnos pasan anualmente por nuestra Escuela de Vela. "Es vital vincular al alumnado a su territorio. Seguramente cuesta tanto a los municipios establecer el vínculo con el mar, porque la náutica ha tenido esta etiqueta de elitista. Pero continuando con la comparación con la montaña, seguramente será más caro un día de esquí que de navegación. Tenemos jóvenes y adultos de todos los estatus sociales practicando este deporte. Hay que ver la náutica como una actividad deportiva como cualquier otra. Practicar la náutica está al alcance de todos. No conozco ningún navegante que no le guste compartir la actividad, estamos regalando una oportunidad a quien nos acompaña", asegura Pepo Roestel.

El Club Nàutic Vilanova ha cerrado un círculo formativo reiniciando la formación en titulaciones náuticas, que hasta ahora lo hacía a través de colaboraciones externas. Hasta este momento, Vilanova y la Geltrú ha tenido dos escuelas náuticas que no ofrecían todas las titulaciones náuticas. Ahora la Escuela Náutica del club ofrece formación desde la Licencia Básica de Navegación hasta el Capitán de Yate. "El club quiso ofrecer estos servicios con el estándar de calidad que caracteriza a nuestra entidad", añade el coordinador. El Club Náutico Vilanova ha alcanzado una coherencia e integridad en toda la formación náutica que abarca a usuarios más pequeños hasta adultos de cualquier nivel, desde una vertiente puramente competitiva o únicamente de ocio.